El test de visión es una parte fundamental de las evaluaciones psicotécnicas para obtener la licencia de conducir en Chile. Sin embargo, muchas escuelas de conductores cometen errores que afectan la precisión de los resultados, la validez del proceso y, en algunos casos, pueden provocar que alumnos aptos sean rechazados o que inaptos sean aprobados. Detectar y corregir estas fallas es clave para entregar un servicio profesional y seguro.
1. Uso de visiómetros no certificados o descalibrados
Uno de los errores más graves es utilizar equipos sin certificación o con calibración vencida. Esto afecta directamente la confiabilidad de la evaluación visual y puede invalidar los resultados ante una fiscalización. Es fundamental trabajar con un visiómetro certificado y mantener actualizados sus mantenimientos técnicos.
2. Aplicar el test en ambientes con luz inadecuada
El entorno influye en la percepción visual. Evaluar en espacios mal iluminados, con luz directa o reflejos sobre la pantalla del visiómetro puede alterar la respuesta del alumno. Se recomienda usar salas con iluminación neutra, sin ventanas directas, y con condiciones de examen estandarizadas.
3. No limpiar correctamente el visiómetro entre evaluaciones
Los lentes, filtros o pantallas del equipo deben limpiarse regularmente. Restos de polvo, huellas o grasa afectan la visibilidad y pueden hacer que el alumno falle la prueba por causas externas a su capacidad visual.
4. No verificar el uso de lentes del alumno
Muchos alumnos con prescripción óptica no informan si usan o no lentes. El evaluador debe preguntar activamente si el alumno usa lentes para ver de lejos, y asegurarse de que los tenga puestos durante la prueba. De lo contrario, el resultado será inválido o reflejará un falso negativo.
5. Realizar la prueba sin instrucciones claras
El test de visión requiere colaboración activa del evaluado. Si no se le explica correctamente cómo responder, cuál es el objetivo de la prueba o qué parte debe leer, es probable que se equivoque por nervios o mala comprensión. Dedicar unos segundos a explicar bien la dinámica mejora sustancialmente la precisión.
6. No registrar correctamente los resultados
Otro error común es anotar solo “apto” o “no apto” sin detallar qué parte del test fue fallida: visión lejana, encandilamiento, percepción de profundidad, etc. Esto impide detectar patrones en los errores de los alumnos y limita la posibilidad de darles retroalimentación útil.
7. Aplicar el test de forma acelerada o sin atención personalizada
Cuando se realiza el test “en serie” para muchos alumnos, se pierde calidad en la aplicación. Cada persona debe ser evaluada con calma, respetando su ritmo. La prisa aumenta el margen de error y reduce la validez de los resultados.
8. Ignorar la importancia de la visión periférica
Algunos evaluadores se concentran solo en la visión central y olvidan evaluar el campo visual periférico, fundamental para detectar peligros laterales durante la conducción. Asegúrate de que tu equipo psicotécnico cuente con esta función y que se utilice correctamente.
Conclusión
La correcta aplicación del test de visión es esencial para garantizar que los alumnos estén realmente aptos para conducir. Evitar estos errores comunes mejora la seguridad, eleva la calidad del servicio ofrecido por tu escuela y contribuye al cumplimiento normativo. Un buen resultado comienza con una buena aplicación.